"Porque un todo está compuesto por varios unos"

¿Cómo adaptar comidas de toda la vida para vegetarianos/veganos?

   Cuando se comienza en el mundo del vegetarianismo o veganismo nos puede surgir la idea de que vamos a pasar hambre porque nuestra alimentación se va a basar en lechuga y verduras al vapor. Pero la realidad es bien distinta, ya que podemos disfrutar de una variedad incalculable de platos nuevos además de continuar con los que ya solíamos comer antes.



Sí, estas leyendo bien, si antes comías una buena tortilla de patatas y ahora has decidido comenzar una alimentación vegana, podrás seguir disfrutando de tu tortilla ya que únicamente tendrás que saber como sustituir el huevo para poder preparar tu tortilla favorita.



Pasarse a una vida vegetariana o vegana no quiere decir que tengas que renunciar a lo que a ti te gustaba antes de ese proceso, solamente se trata de buscar el modo de adaptarlo a tu nueva forma alimenticia, a tus nuevas recetas.



El alimento que más se pregunta la gente sobre cómo puede ser sustituido es la carne. La carne creo que es lo más fácil hoy en día para sustituir, y cuando me refiero a carne me refiero a filetes, hamburguesas, salchichas, embutidos, etc... El tofu y el seitán son la opción rápida e idónea para reemplazar la carne, no sólo por su aporte nutricional sino también porque hoy en día se venden muchos productos para vegetarianos y veganos elaborados como estos alimentos. Respetando la forma que tiene el producto original la persona vegetariana que se encuentra en esa fase de principiante y que ahora será consumidora de hamburguesas vegetarianas, que anteriormente era consumidora de hamburguesas de carne mixta, no le resultará difícil la transición que está sufriendo de un tipo de alimentación a otra. Se podría decir que engañamos al subconsciente.



("Carne picada" de la marca SojaSun, foto realizada por P.M.)


Los huevos pueden ser sustituidos de múltiples formas, por ejemplo:



  • Rebozados y harina para postres que no llevan incluidos huevos (tipo Yolanda)
  • Harina de tempura
  • Harina de soja
  • Harina de maíz
  • Linaza molida y agua
  • Huevo en polvo o mejor llamado “no-egg”
  • Puré de tofu
  • Harina de maíz y agua (tanto para postres como flanes, natillas, como para otros platos que necesiten horneado)
  • Pan rallado o avena en copos para realizar hamburguesas o albóndigas vegetales
  • Puré de fruta (plátano o manzana) para la elaboración de bizcochos



Para realizar una tortilla:



  • Harina de garbanzos y agua, en el caso de que sea con patatas se les añadiría éstas y listo.

  • Harina de trigo o maíz mezclada con harina para cocinar sin huevo y agua.



Los productos lácteos son los más sencillos de sustituir debido a que actualmente existe una gran demanda de leche vegetal. Tenemos desde la leche de soja, pasando por la de avena, la de almendra, la de arroz, coco (esta leche liga más bien con platos exóticos y postres debido a su dulzor), hasta llegar la de quinoa. Además, muchas vienen ya azucaradas o con sabores añadidos, como son la leche de soja sabor vainilla o con sabor a chocolate.



Pero si lo que quieres es elaborar alguna salsa, del tipo bechamel, puedes sustituir la leche de vaca, oveja o cabra por la leche de soja o arroz, pues son las que tienen un sabor más acorde para este tipo de salsas.



Si por el contrario, lo que buscas es un espesante como la nata para cocinar, existe nata de soja y de avena. Asimismo también hay nata para montar y nata montada (en spay) que han sido elaboradas con productos 100% vegetales.



Actualmente se venden productos lácteos (yogures) de soja con y sin sabor, incluso con fruta.



Con el queso pasa un tanto de lo mismo, hoy en día podemos disponer de queso elaborado con productos vegetales. Si no llegásemos a disponer de este tipo de queso o no lo encontrásemos podemos utilizar el tofu como sustitutivo del queso.



Para los postres del tipo de las natillas o flanes, en los supermercados vienen ya preparados en sobres a los cuales únicamente tienes que añadirle agua o leche, en este caso leche de soja o cualquier leche vegetal que prefieras.



Hay muchos más productos que pueden ser sustituidos, como por ejemplo la miel. Si eres vegano puedes sustituir este alimento por miel de melaza.

En los desayunos podemos untar nuestras tostadas con margarina vegetal en vez de mantequilla.



La gelatina puede ser sustituida con algo llamado Agar-agar (es un derivado de las algas) y se puede emplear en postres o para realizar cualquier plato que necesite gelatina.



Como podéis observar no es muy difícil sustituir algunos alimentos por otros para que tengan un resultado similar. No hay que agobiarse con este tema, es lógico que al principio se te haga un mundo pero una vez que le pillas el tranquillo la cosa cambia y el agobio se esfuma.



Yo os he puesto los que sueles preguntarte al comenzar una dieta vegetariana o vegana, pero lógicamente existen muchos “trucos” más.



¿Conocéis algún otro sustituto alimenticio que sea interesante para los que comienzan en la aventura del mundo verdil?, ¿sabíais de estos “truquillos”?.





¡Nos vemos!





Besotes.

 (Pisto con tofu, foto realizada por P.M.)
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